ALGUNAS FOTOS DEL RECORRIDO, AQUÍ
No hay como dejarse llevar con suma tranquilidad y sin planes preconcebidos , por las tierras, pueblos y ciudades de nuestra geografia, para disfrutar de la esencia paisajística y social de los lugares.
Yo me marco una excusa o pretexto un poco lejano de mi lugar de residencia que, hasta hoy en día, se resume a la península ibérica, que ya es bastante, aunque ya estoy valorando el extender mis correrías más allende de este país antes de que cierren fronteras o, suceda algo inesperado pero que está ya volando como nube liviana tormentosa sobre nuestras cabezas.
En ocasiones sucede que ese pretexto para hacer un viaje no es visitado, pues a medida que empieza el recorrido y aparecen nuevas y apetitosas opciones a izquierda y derecha, opto por estas. Y así sucede que, objetivos perseguidos durante años, se releguen y retrasen en el tiempo de forma prolongada y los suplan otros a los que, sin embargo, había sido reacio.
Esto me ha sucedido ahora en que tenia un objetivo o pretexto como era Nuria, ese santuario al que se accede por medio de un tren cremallera y que a causa de meterme por unos intrincados y sugestivos terrenos, me vi forzado poco a poco a desviarme de la ruta ligeramente preconcebida y dejo esta para otro momento. Seguirá siendo un pretexto y no me cabe duda de que tampoco cumpla el objetivo.
Fui a parar a Solsona y de allí, por carreteras que no vienen verdeadas como referencia de pintorescas, me adentré y descubrí bellezas naturales que me deleitaron tanto el verlas, como el deslizarme por la carretera a menos de 30 km.por hora.
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